Un gobierno de humo, un presupuesto de humo, una represión de humo
por Horacio Dall'Oglio25 de octubre de 2018
Por toda la plaza, otra vez, hay humo.
Atrás y delante de las vallas, hay humo.
Afuera y adentro del Congreso, hay humo.
En la cabeza de diputados, en sus bancas y en sus gordos culos sentados, hay humo.
En la responsabilidad y la previsibilidad, hay humo.
En las hojas A4 que agitan enardecidos al aire con números mentirosos, hay humo.
En los rulos del político canchero que supo ser embajador de la miseria y ahora juega al opositor razonable, hay humo.
En los discursos del diálogo y la felicidad y las inversiones por venir (que nunca llegan), hay humo.
En el tablero con los 138 votos afirmativos en verde, hay humo.
En la cabeza de diputados, en sus bancas y en sus gordos culos sentados, hay humo.
En el endeudamiento insaciable para poder crecer y desarrollarnos, hay humo.
En las políticas neutrales y asépticas de los tecnócratas platónicos, hay humo.
En los medios que hablan de violentas protestas y muestran unos pobrecitos bancos rotos mientras ningunean la movilización, hay humo.
En los canas que disparan impunes sentados en la parte de atrás de una moto, y que recuerdan a esos otros-mismos canas de diciembre del 2001, hay humo.En las escopetas humeantes y en los cartuchos made in usa, hay humo.
En las capuchas de los ratis-anarquistas que se esconden detrás de una careta de lana y tiran piedras a su patrón, hay humo.
En los capucha-infiltrados que intentan robar una camioneta a la vista de todos, hay humo.
En los gases que hacen lagrimear los ojos, y que vuelan para persuadirnos de las bondades de un gobierno entreguista, hay humo.
En el agua a presión que dispara el camión hidrante para apagarnos la bronca, hay humo.
En los discursos del diálogo y la felicidad y las inversiones por venir (que nunca llegan), hay humo.
En sus cascos de robocop, en sus trajes de tortugas ninjas y en sus bolsillos eternos de municiones, hay humo.
En el cana que se tira sobre el manifestante como en una pelea de catch y le hace una llave con las piernas sobre la vereda-ring, hay humo.
En ese otro cana que espera agazapado con su uniforme y su barreta en mano y que se acerca para plantar la prueba sobre la vereda-ring, hay humo.
En ese otro poli que se tira de la moto sobre el cordón-colchón de la vereda y que desata una nueva cacería, hay humo.
En la hilera de detenidos precintados boca abajo, hay humo.
En las heridas y en los golpes de los detenidos precintados, hay humo.
En la democracia que llena la plaza de gases mientras en las casas (y en las panzas) hay hambre, hay humo.

Un presupuesto que sólo reparte palos
Para conseguir un presupuesto que ajusta en todo menos en el pago de la deuda pública se necesitan infiltrados, represión y detenciones a militantes y periodistas elegidos específicamente.
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“Si tuviéramos una camioneta, la usaríamos para llevar comida a los comedores"
Laura Toledo, de La Garganta Poderosa, cuenta detalladamente la operación mediática y del Ministerio de Seguridad que sufrió la revista villera, además de la represión policial y las detenciones en la Comisaría 10 del barrio de Floresta.
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Así destroza vidas Patricia Bullrich
Lucas fue a comprar ropa pero se cruzó con la represión de la policía durante el tratamiento del Presupuesto 2019 en Diputados y no sólo no consiguió los shorts que iba a buscar sino que también perdió su trabajo porque le quedó un antecedente.