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Charly y la lógica de la rebelión contra la matrix: Rompela

Diego Pintos
12 de septiembre de 2024

Se paró, como ayer, como hoy, como siempre. Se plantó ante Juan Represión, como ayer, como hoy y como siempre. También contra el autotune, como ayer, como hoy, como siempre. “Por ahí soy un tradicionalista, pero para mí la música es melodía, armonía y ritmo. Lo que hay ahora es ritmo, pero le falta la armonía y la melodía”. Ah, y sacó otro disco. Charly es leyenda, ayer hoy y siempre.

En una Argentina que parece tambalear entre la indiferencia y la represión, Charly García emerge como el último bastión de resistencia musical y política. Su nuevo disco, La Lógica del Escorpión, no es solo una colección de canciones; es un manifiesto visceral contra un sistema que sigue perpetuando la injusticia y el olvido. En tiempos en que la opresión de Javier Milei se cierne sobre el país, la música de García se convierte en una llamarada que desafía el status quo y encarna la resistencia incansable de una generación que se niega a ser silenciada.

Yo ya sé. Desde el mismo primer acorde (acorde es armonía, algo que el autotune fordista actual destruyó), La Lógica del Escorpión marca un regreso a la autenticidad y la valentía que siempre caracterizaron al rock argentino. Charly, sin miedo a mostrar su vulnerabilidad, nos presenta un álbum que es un grito de guerra contra la apatía y la corrupción que han marcado el presente político y social de Argentina. La decisión de García de reversionar Juan Represión no es una simple mirada al pasado; es un llamado urgente a recordar las lecciones de la historia y a luchar contra las sombras de la represión que vuelven a asolar las calles.

La fábula legendaria de la que se habla en La Lógica del Escorpión es un relato alegórico que utiliza la figura del escorpión para transmitir un mensaje profundo sobre la naturaleza humana y la inevitabilidad de los comportamientos instintivos. La fábula cuenta la historia de un escorpión y una rana que se encuentran en una orilla de un río. El escorpión le pide a la rana que lo ayude a cruzar el río, prometiéndole que no le hará daño. Aunque la rana es reacia debido a la naturaleza peligrosa del escorpión, finalmente accede a ayudarlo. Mientras cruzan el río, el escorpión pica a la rana, lo que provoca que ambos se hundan. Antes de que mueran, la rana, sorprendida por la traición, le pregunta al escorpión por qué hizo esto, dado que la muerte de la rana también significará la suya propia. El escorpión responde que no pudo evitarlo, ya que su naturaleza le obligó a actuar de esa manera.

 

¿Dónde aparece la cola del escorpión en estos tiempos aciagos? ¿A quiénes asesta su veneno?

 

¿En La Lógica del Escorpión, García utiliza esta fábula como una metáfora para explorar temas más amplios sobre la traición, la corrupción y la naturaleza humana? La historia del escorpión y la rana ¿se convierte en un símbolo de la lucha contra las fuerzas que son inherentemente destructivas o corruptas, y refleja el sentido de inevitable conflicto y traición que a veces se experimenta en la vida real y en el contexto político y social?

La fortaleza de este disco radica en su autenticidad. Como la del club de los 27. Lejos de ocultar las cicatrices del tiempo, Charly las abraza, transformando su voz desgastada en un instrumento de poder y verdad. La Lógica del Escorpión no busca complacencia ni la perfección técnica que otros discos de su carrera pudieron haber aspirado. Es la medicina. Son estrellas al caer. En lugar de eso, nos presenta un Charly más crudo, más honesto, que se enfrenta a las realidades dolorosas de nuestra era con una valentía que solo la verdadera militancia rockera puede ofrecer.

Entre las voces de García aparecen sus aliados alados de ayer, de hoy y de siempre: David Lebón, Pedro Aznar, Fito Páez y la voz del Flaco Spinetta. Unidad y resistencia en un momento en que la división y la apatía parecen ser la norma. Versionar Juan Represión, por ejemplo, no es solo un acto de recuerdo; es una reclamación de la memoria histórica. García sabe que su música tiene el poder de cambiar percepciones y movilizar conciencias, y lo usa con una claridad y propósito que desafía el conformismo. La versión moderna de Juan Represión es un grito de resistencia que resuena con la urgencia del presente.

En La Lógica del Escorpión, Charly García no se limita a hacer un comentario social; se convierte en un agente de cambio. La energía de sus canciones es un llamado a la acción, un recordatorio de que la resistencia no solo es posible, sino necesaria. Su música, rica en simbolismo y en crítica política, se enfrenta a un establishment que intenta silenciar la verdad y perpetuar la injusticia. Cada pista del álbum es una declaración de intenciones, una invitación a cuestionar, a rebelarse, a luchar.

El hecho de que Charly García siga haciendo música en medio de las dificultades es, en sí mismo, un acto de resistencia. Se enfrenta a los temores y desafíos de su tiempo con una energía renovada y una pasión inquebrantable. Su música es un faro en la oscuridad, como ayer, como hoy, como siempre.