Compartir

ANSES les niega la jubilación a dos personas no binaries

por Estefanía Santoro
12 de mayo de 2025

Ale y Kimey son adultes mayores no binaries, se jubilaron el año pasado y a pesar de tener el trámite aprobado no pueden cobrar su jubilación porque ANSES se niega a pagarles. Un claro ejemplo de discriminación institucional por acceder al derecho de su identidad autopercibida.

Kimey trabajó toda su vida en la economía popular, fue artesana, cuidó personas, limpió casas y se desempeñó en las huertas comunitarias del INTA. Hace un año logró jubilarse gracias a la moratoria, pero todavía no cobró un peso.

Ale tiene 29 años de aportes como docente de la Ciudad de Buenos Aires y a pesar de contar con todos los requisitos y la edad para jubilarse debe seguir trabajando porque ANSES se niega a otorgarle su derecho a una jubilación digna

Ni Kimey ni Ale pueden dar de alta sus jubilaciones porque “ANSES dice no tener normativas para DNI no binarios”. “Es curioso lo que argumentan porque es el propio Anses el que debe hacer la normativa”, denuncia Kimey. 

Iniciaron un amparo judicial. Ale consiguió sentencia favorable, pero Anses desconoce la decisión de la Justicia. Kimey está aún peor, no tiene respuesta. Elle sobrevive con 78 mil pesos de un Potenciar Trabajo para mayores de 50 años. “Ya realizamos todos los reclamos administrativos, sólo nos respondieron con la negación. Estamos muy mal y ya no sabemos qué más hacer". 

De las más de 1500 personas no binarias con DNI en Argentina, Kimey y Ale son las primeras que se encuentran en edad de jubilarse. Cumplen todos los requisitos para hacerlo, pero el Estado les niega sus derechos

En su artículo 2° la Ley de Identidad de Género define: “Se entiende por identidad de género a la vivencia interna e individual del género tal como cada persona la siente, la cual puede corresponder o no con el sexo asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo”. Y en su artículo 3° establece: “Toda persona podrá solicitar la rectificación registral del sexo, y el cambio de nombre de pila e imagen, cuando no coincidan con su identidad de género autopercibida.”

El 20 de junio de 2021 se incorporaron los Documentos Nacionales de Identidad con la opción “X” para las personas que se autoperciben no binaries. Sin embargo, algunas instituciones estatales y privadas presentan trabas y negativas a la hora de respetar la legislación vigente. 

Ale cuenta que también tuvo inconvenientes para realizar trámites en la ex AFIP, hoy ARCA. Lo mismo sucedió cuando quiso obtener su pasaporte: las demoras fueron excesivas y le exigieron la declaración del inicio de trámite de DNI no binario, a pesar de contar con la documentación correspondiente que acreditaba su identidad. “Pasé por situaciones de discriminación, destrato y me dieron muchas vueltas para poder finalizar mi trámite”, asegura. 

“Todes tenemos derecho a ser bien tratades, a tener un salario digno después de haber aportado o no, porque muches hacen trabajos de cuidados o informales y merecen ser reconocides. Deberíamos poder cambiar el paradigma que sostiene que los viejos y las viejas son de descarte. Tenemos la sabiduría de haber trabajado y la sabiduría de lo vivido y nos merecemos disfrutar la vida sin pasar necesidades. Este gobierno destruye todo lo que toca, vienen a enriquecerse a costa del pueblo”, advierte Ale. 

Por su parte, Kimey se pregunta: “¿Cuánto cuestan los operativos infernales que montan para reprimir a jubilades? ¿Cuánto cuestan los cartuchos, las balas, los imponentes trajes que usan? ¿Cómo se gasta descaradamente ese dinero en operativos infames y desproporcionados en lugar de ofrecer alguna solución a las condiciones miserables en las que tenemos que vivir las personas mayores?”. Y concluye: “La lucha de les jubilades es justa y admirable porque se trata de personas empobrecidas y vulnerables como son les viejes que le están poniendo el cuerpo a esa lucha, no solo por sus vidas sino también por toda la sociedad, que en gran parte les mira impávida. El gobierno nacional es cruel, además de profundamente injusto”.