Los carabineros reproducen los métodos de tortura de la dictadura
por Estefanía SantoroFotos: Migrar Photo
25 de octubre de 2019
La Asociación de Abogadas Feministas de Chile (Abofem) denunció hechos concretos de violaciones a los derechos humanos de las mujeres, durante las detenciones ilegales en las calles y también dentro de las comisarías.
Desde el 18 de octubre, cuando el pueblo de Chile comenzó a manifestarse por las calles, la represión de parte de las fuerzas de seguridad del Estado no ha frenado, al contrario, se ha recrudecido. Las mujeres están sufriendo tratos especialmente crueles por su condición de género, incluyendo a menores de edad. Carabineros y militares están reproduciendo los mismos métodos de tortura, violencia sexual y psicológica propios de la época de la dictadura militar de 1973.
Barbara Sepulveda, directora de la Asociación de Abogadas Feministas de Chile (Abofem) aseguró hoy: “Hemos recibido muchas denuncias a nivel nacional de mujeres que han sufrido tratos vejatorios, humillaciones. Han sido obligadas a desnudarse forzadamente en las comisarias, luego a sentarse en cuclillas y esto frente a las demás detenidas. Hay muchas mujeres que son menores de edad. En estos procedimientos, los carabineros las golpearon mientras estaban desnudas, se burlaban de sus cuerpos, las obligan a saltar o las mantenían durante largo tiempo en estas posiciones.”
Carabineros y militares están reproduciendo los mismos métodos de tortura, violencia sexual y psicológica propios de la época de la dictadura militar de 1973
Estas formas de tortura específicamente dirigidas a mujeres, son formas de castigos que buscan disciplinar y castigar a aquellas que salen a luchar y a desafiar su rol dentro de una sociedad patriarcal. Sepulveda cuenta que durante las torturas “proceden a revisar sus genitales, un procedimiento que es absolutamente ilegal, no existe ningún protocolo de Carabineros que los obligue a realizar este tipo de maniobras, sin embargo, esto se está repitiendo y no solo lo hacen Carabineros, sino también, las policías de investigaciones. Esto hace mucho más difícil poder hacer denuncias de estas violaciones a los derechos humanos porque todas las policías están actuando de la misma forma. Nos quedan muy pocas instituciones a las cuales podemos recurrir para denunciar respecto de estos vejámenes.”
En un contexto generalizado de violencia policial que se manifiesta durante las represiones en las calles, los oficiales detienen a las mujeres con mayor saña y es en esos momentos también donde reproducen la violencia sexual: “Cuando toman detenidas a mujeres, les tocan sus partes íntimas, sus pechos y las mantienen largas horas hacinadas en los carros policiales dando vueltas por la ciudad, antes de dejarlas en una comisaría”, explica Sepulveda.
Las abogadas pudieron acceder a estos testimonios porque están en contacto directo con las víctimas, pero existen delitos cometidos por las fuerzas represivas que hoy el Gobierno está ocultando: “Nos preocupa muchísimo que existen muchas personas que se sabe que fueron detenidas y hoy día no se conoce su paradero, ese número ha ido aumentando lamentablemente con el pasar de los días”, asegura Sepulveda y agrega: “Hacemos un llamado a las autoridades públicas y políticas de Chile a que nos entreguen información respecto de estas personas porque a las abogadas y abogados de derechos humanos en Chile hoy existe un cerco informativo, nos están bloqueando los accesos a los registros públicos de detenidos en las comisarías y de esta forma no podemos cotejar con las personas que tenemos denuncias, incluso por presunta desgracia, porque ya han pasado varios días desde que desaparecieron y no podemos saber si efectivamente están o no en una comisaría. Esto es lo que estamos viviendo desde el viernes 18 de octubre”.
"Nos están bloqueando los accesos a los registros públicos de detenidos en las comisarías"
A estas situaciones de violencia extrema por parte de las fuerzas estales se le suma el asesinato de dos mujeres cuyos cuerpos han aparecido en la vía pública, golpeados y con signos de haber sido violadas. Carlos es integrante del programa de calle de la Organización No Gubernamental De Desarrollo Social Cul Produc Cidets (CIDETS) y trabajador del Centro Cultural La Bicicleta, prefiere no dar su nombre completo, tiene miedo. Contó a Cítrica que ayer el cuerpo de Daniela Carrasco, conocida como la Mimo, fue encontrado por un trabajador. Estaba colgada en un parque de La Victoria, un barrio de bajos recursos perteneciente a la comuna Pedro Aguirre Cerda de la ciudad de Santiago, que tiene una fuerte historia política de organización barrial. Las personas que viven allí aseguraron que un grupo de Carabineros estuvo presente en el perímetro donde apareció el cuerpo.
La familia no pudo tener acceso a los registros del servicio médico que trasladó el cuerpo y exigen que se investigue su muerte, debido a que todo apunta a que habría sido asesinada por las fuerzas. “El caso de Daniela no es azaroso, ella es hija de un antiguo activista de la población La Victoria por lo que creemos que esto es una señal de amedrentamiento hacia las organizaciones de la población”, afirma Carlos.
El otro caso se trata de una mujer que se encontraba en situación de calle, en la zona sur de Santiago: “Mis compañeros la encontraron colgada el lunes, estuvieron más de tres horas resguardando el cuerpo, no querían tocarla para no interceder en un posterior peritaje. Rápidamente llamaron a las instituciones que deberían hacerse cargo de eso, pasaron tres horas, nadie llegó. La respuesta que tuvieron desde el Estado fue que eso no era una prioridad en ese momento”, relató Carlos y agrega: “Las personas en situación de calle a ojos del Gobierno y de la represión son personas que no van a ser reclamadas por nadie, son ciudadanos de tercera, pero desde las ongs estamos acompañando estos casos. El subsecretario del ministro de Desarrollo dijo en los medios de comunicación que no hay ninguna persona en situación de calle dañada, eso ya quiere decir que se están tergiversando los números”.
"Las personas en situación de calle a ojos del Gobierno y de la represión son personas que no van a ser reclamadas por nadie, son ciudadanos de tercera".
A pesar de todos los testimonios, videos y fotos que hoy circulan en las redes sociales y en los medios autogestionados que no son funcionales al gobierno de Piñera, y que representan pruebas fehacientes de los delitos y violaciones a los derechos humanos cometidos por las fuerzas represivas del Estado chileno, el ministro del Interior, Andrés Chadwick no ha realizado ninguna declaración al respecto. Sepulveda asegura: “Chadwick es uno de los responsables del descalabro que existe hoy día ha tenido un pésimo manejo respecto de la protesta social. Evidentemente las fuerzas que actúan bajo el mando del Ministerio del Interior están ejerciendo atribuciones que no tienen, tomando decisiones, privando información, deteniendo ilegalmente, abusando, golpeando, disparando a quema ropa contra manifestantes, con armas de fuego. La situación es muy grave, al día de hoy tenemos 50 personas ciegas por impactos de perdigones en sus ojos que les produjo estallido ocular y 295 heridos de fuego, por el actuar de sus policías, de los militares que el Gobierno puso en las calles.”
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