Cerraron las listas, ¿y nosotras?
por Mariana AquinoFotos: Juan Pablo Barrientos
24 de junio de 2019
El hashtag #FeministasEnLasListas se impuso unos días antes del plazo que dio la Justicia Electoral para competir en las Primarias de agosto. Por primera vez se aplica la Ley de Paridad y se exige lugares destacados para las militantes con perspectiva de géneros. ¿Qué ocurrió finalmente? Un mapa con lo que hizo cada partido.
Las mujeres, lesbianas, travestis y trans estallamos las calles con nuestros reclamos, presentamos leyes y marcamos agenda. Sin dudas, nuestro arribo es político pero eso no se refleja en la representación. Generalmente, las dirigentes feministas no encabezan fórmulas y en las listas tienen lugares relegados.
La política sigue siendo un sector dominada por varones. Aun cuando tenemos una Ley de Paridad (que desde marzo de este año compromete a todas las fuerzas a que presenten listas integradas por candidatas y candidatos de manera intercalada), vemos muy pocas mujeres en las fórmulas presidenciales, y una sola ganó en lo que van de las elecciones el cargo de gobernadora.
En la provincia de Buenos Aires hay ocho listas y la única mujer para el cargo de gobernadora es la actual: María Eugenia Vidal; quién está en contra del Aborto Legal, tiene un gabinete totalmente integrado por varones y no se considera a sí misma como feminista.
“Al sistema patriarcal les molesta mucho nuestra participación. Desobedecer al patriarcado tiene su precio y los varones no aliados se atajan", dice Agostina Agudin
En las listas de diputadxs nacionales por la provincia Buenos Aires, la única mujer que tiene el primer lugar es Graciela Camaño (Consenso Federal), y en la de diputadxs nacionales por la Ciudad de Buenos Aires son solo dos mujeres: Myriam Bregman (FIT - Unidad) y Marina Hidalgo Robles (Nuevo Más). La única mujer que encabeza lista de Senadores en Caba es Inés Zadunaisky (Nuevo Más).
“Al sistema patriarcal les molesta mucho nuestra participación y no es gratis organizarse. Desobedecer al patriarcado tiene su precio y los varones no aliados se atajan; lo hacen desde sus privilegios y nos invisibilizan más. Las mujeres y las disidencias estamos en la militancia territorial pero no en la representación. Y para esas pocas mujeres que llegan a ocupar cargos aumenta la hostilidad y la violencia simbólica”, advierte Agostina Agudin, politóloga feminista y militante de El Hormiguero.
¿Cómo hacer para que el Congreso apruebe el Aborto Legal? ¿Cómo reclamar Educación Sexual Integral? ¿Dónde explicar que las travestis y trans mueren antes de los 35 años porque el sistema las desecha? ¿Cómo denunciar que somos nosotras las más perjudicadas por las políticas de crisis y hambre? ¿Cómo? Si no tenemos bancas.
“Nosotras venimos poniendo mucho esfuerzo en la lucha. Hemos llevado listas de 70% mujeres cuando la paridad no existía, para demostrar que las mujeres no son relleno. Derechos como el del Aborto Legal deben constar en las plataformas partidarias para que no haya sorpresas”, afirma Myriam Bregman, la precandidata a diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires (FIT - Unidad).
#FeministasEnLasListas
El hashtag no salió de un repollo, tiene su correlato con la historia de Argentina y Latinoamérica. “Las feministas tenemos que estar porque somos parte de esos espacios y queremos disputar política en todos los sentidos. No estamos en la política para ocuparnos solo de Acción Social y Educación. Queremos salir de la mesa de género y disputarlo todo”, destaca Agudin.
Dora Barrancos es candidata a senadora por el Frente de Todos en Capital Federal. Su postulación, que primero fue tendencia en Twitter, es leída por el feminismo como un triunfo del movimiento. “Creo que las elecciones de octubre van a posibilitar una ocupación en cargos de representación popular importantes para muchas mujeres que militan el feminismo. No encuentro un ciclo anterior que refleje tanta expectativa como la que se abrió el último año. Este es un ciclo inédito para proponer y batallar por una agenda de políticas públicas feministas. Estamos ante la evidencia de feminismos populares como nunca antes. Y eso me despierta un enorme optimismo”, le dice a Cítrica la socióloga e historiadora.
No hablamos de cupo sino de paridad. Y en esa paridad no nos alcanza con que haya mujeres en las listas, necesitamos perspectiva de género en la definición de políticas públicas y la presentación de leyes. El fenómeno de Amalia Granata lo confirma. En una de sus primeras declaraciones como diputada electa por Santa Fe dijo: “Van a tener que seguir abortando en la clandestinidad”. Con esas palabras livianas avaló, abiertamente, que las mujeres y cuerpos gestantes abortamos y morimos haciéndolo, pero eso no importa.
La Ley de Paridad es un buen punto de partida pero falta terreno por conquistar. Las lesbianas, travestis y trans están más lejos aún de conseguir sus propias bancas, por lo tanto sus demandas todavía no tienen plena representación.
Una propuesta bien celeste
Juntos por el Cambio, la alianza electoral que intentará mantener a Mauricio Macri en la Casa Rosada, puso al frente a referentes que militan los pañuelos celestes. De la foto de Macri con Granata en Olivos al cierre del oficialismo hay un hilo conductor: Victoria Morales Gorleri durante diez años fue secretaria de la Vicaría Episcopal de Educación, es militante pro-vida y acompaña a Maximiliano Ferraro en la Ciudad de Buenos Aires; también se ganó un lugar Dina Rezinovsky, una funcionaria del Ministerio de Salud y Desarrollo Social porteño que integra la agrupación “Celestes por el cambio”.
"No encuentro un ciclo anterior que refleje tanta expectativa como la que se abrió el último año", asegura Dora Barrancos
En la provincia de Buenos Aires un dirigente evangelista se presentará desde Juntos por el Cambio: Gabriel Mraida, actual director nacional de Reducción del Delito y la Violencia en el Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich. En cambio, Daniel Lipovetzky, uno de los macristas más activos en favor de la despenalización del aborto, quedó fuera de las listas oficialistas.
El actual diputado nacional Pablo Torello, quién alentó hace unos meses un comentario en twitter de que “las feministas son incogibles”, fue premiado con un lugar para renovar su banca en la lista que encabeza Cristian Ritondo en la provincia de Buenos Aires. La postulación de la ministra de Desarrollo Humano porteño, Guadalupe Tagliaferri, como segunda en la boleta para senadores, es el único gesto del macrismo en favor del aborto legal.
Por qué nos costó tanto llegar
Según un trabajo de la organización Economía Femini(s)ta, en la Argentina las mujeres ganamos 27% menos que los varones, hacemos tres veces más tareas domésticas y de cuidados no remunerados, sufrimos mayores niveles de precarización laboral y desempleo.
No queremos seguir siendo las “heridas” de los cierres; no queremos que el poroteo nos deje afuera. ¡A hacer lugar, muchachos, que entramos todes!
La pobreza es sexista, por eso necesitamos perspectiva de género en las políticas públicas. Mercedes D'Alessandro, integrante de Economía Femini(s)ta, asegura: “Las malas condiciones de inserción laboral, la penalización que implica para muchas la maternidad, las extensas jornadas laborales y en el hogar, la discriminación hacia lesbianas y trans, los estereotipos de género, han sido elementos que durante mucho tiempo han alejado a las mujeres de la política o las han retenido en posiciones subsidiarias, con honrosas excepciones”.
Hay muchas compañeras valiosas –de diferentes espacios políticos– militando en los barrios, formándose en las aulas y en las calles. ¡Cuántas feministas puede haber en una lista! No queremos seguir siendo las “heridas” de los cierres; no queremos que el poroteo nos deje afuera; estamos dispuestas a agarrar la lapicera por el mango. La conquista de nuestros derechos viene de la mano de disputar espacios de poder, por eso es tan importante que haya feministas en las listas. Vinimos por lo que nos negaron durante toda la historia. ¡A hacer lugar, muchachos, que entramos todes!
El aborto ¡es ley!
Con 38 votos a favor y 29 en contra, el Senado aprobó la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Un hito histórico que recoge una lucha de largo aliento y abre un futuro mejor para las nuevas generaciones.
Una mirada sanitaria de la despenalización
El impacto de legalizar la interrupción del embarazo se notará en un sistema sanitario que gasta más de 2.500 millones de pesos anuales en atender las complicaciones de las prácticas clandestinas. Lxs especialistas afirman que están dadas las condiciones para atender la demanda de las personas gestantes en los hospitales.
Carnaval verde y feminista
La fiesta pagana gana las calles porteñas, donde las mujeres se organizan y toman roles cada vez más protagónicos. La visibilidad de murgueres con identidades disidentes. Corsos libres de violencias, pañuelos verdes en los bombos, en las galeras y en las levitas.