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"Perdón, Bilardo"

Una apuesta, una frase que se transformó en bandera y un hijo que recuerda a su padre a treinta años de Argentina campeón

Antonio Robledo nació en 1926 y murió en 2011. Era llamado Bebe. Hijo de laburantes, se crió frente a la vieja cancha de Vélez, de quien era  hincha. Allí jugó en Inferiores junto al arquero Rugilo que luego se hizo famoso en la Selección como “El león de Wembley”. Bebe comenzó su carrera de comerciante a los 12 años vendiendo pastillas en esa cancha. Luego se recibió de contador público y fundó y presidió una importante empresa: Autogas S.A. Obligado por YPF y Shell, tuvo que malvenderla en 1997.  Siempre conservó el espíritu y los amigos del “rioba” y, como parte de ese espíritu, estaba su amor al fútbol. 


Llegado 1986, todos criticaban duramente a Bilardo que estaba al frente de la Selección. José Luis era amigo de Bebe e hincha de Estudiantes y apoyaba incondicionalmente a Bilardo. Entonces Bebe le apuesta: “Si llegamos a  la final te llevo a verla”.Cumpliendo la apuesta, Bebe y José Luis volaron a México con una gran bandera Argentina en la valija que Bebe había creado, con la leyenda: “Perdón Bilardo. Gracias”. 

Fueron tempranito al estadio Azteca y colgaron el trapo en la baranda de la platea baja. Al finalizar el partido los mismos policías ayudaron a Bebe y a José Luis a saltar a la cancha con la bandera, que se perdió en el tumulto y hoy es historia. 

Bebe siguió amando el fútbol. Años más tarde vio absorto desde la platea,  junto a mí y mi hermano, cómo una enfermera retiraba a Maradona de la cancha. Y una vez, viendo por tevé un baile del Barcelona al Real Madrid de la mano de Messi, Bebe sollozó : "¡Esto es un ballet!" Y se puso a llorar de la emoción. IguaI que yo hoy, a 30 años de la hazaña de la selección de Bilardo y de la bandera de mi querido viejo.

Javier Robledo