La Corte Interamericana de Derechos Humanos le ordenó al Estado argentino que otorgue un título de propiedad colectiva sobre 400.000 hectáreas a las 132 comunidades indígenas que habitan el lugar y asegure la relocalización de las familias criollas instaladas en ese territorio. Por qué este fallo es fundamental para la mitigación de la crisis climática.