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Horacio Fiebelkorn: Autopista Buenos Aires-La Plata

Belén Iannuzzi
08 de noviembre de 2015

Cítrica presenta un poeta platense que sabe conjugar el asfalto y la lírica, entre ambas ciudades capitales.


El temporal levantó los techos


El temporal levantó los techos
cambió los ruidos de lugar,
barajó cartas, pasos, nadie
levantó la mano. Pronto llegará el frío,
más vale reunir hojas para el fuego
antes de acariciar los bloques húmedos
o dibujar una cara en la arena de la plaza.
A la hora del fastidio y los despertadores
la noche guardará su música para el cuadro siguiente.
Nada más que el agua bajo los pies que me llevan
a ninguna parte.



De la ciudad de los tilos en flor, con sus frisos de polvo amarillo coloreando los cordones de las veredas, a la ciudad de los jacarandás, esa perla frenética que se erige sobre un río al que le da la espalda. La Plata y Buenos Aires, ida y vuelta; la poesía de Horacio Fibelkorn es la autopista que une esos puntos, con sus calles en diagonal, sus casas bajas, sus departamentos de alumnos universitarios, sus recitales, sus bares. Y otros más: lo urbano, la cultura rock, la contemplación de un paisaje con el hombre sumado a él, lo cotidiano, el paso del tiempo. Sus poemas transitan ese camino de asfalto suave con una musicalidad envidiable. Sus poemas son la banda de sonido de una ruta argentina una tarde de invierno. 

Horacio Fiebelkorn nació en La Plata en 1958. Vive en Buenos Aires desde el año 2004. Publicó los libros de poesía Caballo en la catedral (1999), Zona muerta (2004), Elegías (2008), Tolosa (2010), Pájaro en el palo (2012), El sueño de las antenas (2013). Editó, entre 1998 y 2003, la mítica revista de poesía La Novia de Tyson, junto a Rodolfo Edwards y Washington Cucurto. Su obra poética fue traducida parcialmente al portugués. Es hincha de Estudiantes de La Plata.