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Despidos disciplinatorios en la Escuela Ort: “Queremos trabajar sin miedo”

por Revista Cítrica
16 de diciembre de 2019

Melina Merkier, docente de la sede de Almagro de la tradicional Escuela Ort, denuncia el amedrentamiento que sufren en la institución y destaca la organización de les trabajadores.

“Nueve de los 10 que fuimos despedidos participamos activamente en la organización gremial desde el año pasado. Siete somos mujeres, de las cuales cuatro somos madres. El año pasado, por primera vez en la historia de la Ort hicimos un paro tras la muerte de Sandra y Rubén (docentes fallecidos por la explosión en una escuela de Moreno), y ese fue un antes y un después. El viernes negro le llamaron los directivos de la escuela. Ahí fue también cuando empezamos a organizarnos por cosas muy simples: nos dimos cuenta que no entendíamos algunos ítems del recibo de sueldo y que la escuela no cumplía con ciertos derechos laborales. Por ejemplo, nos ponían las reuniones obligatorias en horario de almuerzo, que además es un horario no remunerado; tampoco cumplían con las jornadas de mejora institucional, que son obligatorias en todas las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires; ni cumplían con las jornadas ESI (Educación Sexual Integral).

Docentes de muchos años nos decían que tengamos cuidado porque la última vez que hubo un intento de organización, en 1988, echaron a todos los delegados. Así mantienen el miedo y las prácticas de disciplinamiento con un sistema de premios y castigos: más horas para quienes son condescendientes y menos a quienes se animan a reclamar por sus derechos.

Este año elegimos por primera vez un cuerpo de delegados en una elección de la que hubo una gran participación de docentes: hubo 130 votos de un plantel de 250. Nunca pensamos que después de 30 años del último intento, con esta tradición de años de democracia, iban a volver a despedirnos. No lo hicieron con los delegados y delegadas, pero sí con el activismo. Y también echaron a una compañera que no estuvo metida en la organización precisamente por no exponerse. La echaron igual”.

El testimonio es de Melina Merkier, docente de la sede de Almagro de la tradicional Escuela Ort, fundada por la comunidad judía hace más de 60 años. Fue precisamente en esa sede donde nació la organización de sus trabajadorxs a pesar del miedo y el amedrentamiento. El viernes pasado, diez de ellxs fueron despedidos sin causa alguna y sin preaviso. Algunxs se enteraron cuando llegaron a la sede y se dieron con un dispositivo de seguridad que impedía el ingreso a lxs cesanteados. Otrxs lo sospecharon porque de repente tenían inhabilitado el acceso a sus cuentas de mail institucional. Unxs pocos recibieron el telegrama en sus domicilios.

“Nosotrxs vamos a luchar por nuestra reincorporación pero también para que todxs podamos trabajar sin miedo”, recalca Melina, docente desde hace dos años en la escuela, pero también ex alumna de la institución que -dato no menor- recibe 60% de subsidio del Estado, tiene dos sedes en CABA y más de 7200 estudiantes.