Lara Bertolini, soberanía travesti
Guido encontró a su abuela. Quienes nacimos en democracia la adoptamos también como la nuestra. La historia de cuando un compañero la conoció en la sede de San Telmo.
La conocí en el templo de la calle Virrey Cevallos. Para mi en ese lugar hay diosas terrenales. Mujeres que buscan pacíficamente hace ya casi 40 años a sus nietos apropiados; para mi son personas con poderes sobrenaturales y ejemplos a seguir, Diosas. Cuando conocí a Estela, la diosa más famosa, ella me dijo que me parecía a su nieto. Pero yo no quería parecerme. En la nube en la que uno queda al conocer a quien admira, olvidé a sus otros trece nietos y pensé sólo en Guido. Ido del mundo imaginé que Estela reflejaba en mi a su nieto por aquel entonces desaparecido. En el recuerdo hasta me parece haberla escuchado decir: "Podrías ser mi nieto".
Seguramente hablaba de otro nieto y un simple parecido pero en ese momento en mi cabeza yo para ella era Guido. Y no quería.
Nací en 1984, unos cuantos años después que Guido. Mis padres se autodefinen como progresistas y mi madre como kirchnerista no absolutista. En la dictadura, ella se fue a vivir a Israel; él sacaba fotos y no hablaba de política. Tengo dos abuelas que aún detestan al General Perón y se ponen nerviosas cuando ven la figura de Evita en la televisión. Mis ideas seguramente se parezcan más a las de los Carlotto que a las de mi familia. Pero aún así quiero a mis padres y abuelas. Porque son los míos. Porque de mis abuelas aprendí cómo se puede amar tanto a un nieto -a una persona con la que te separa una brecha generacional inmensa pero te une un vínculo inexplicable-.Porque me traspasaron sus gustos y sus costumbres. Porque ellos para bien o para mal me conformaron. Porque son mi identidad. Y eso, según nos enseñó Estela, es sagrado.
Por todo eso no quería ser Guido. Pero sobre todo porque quería que Guido tuviera la identidad que le correspondía. Igual que yo la tengo. Yo quería que Ignacio Hurban fuera Guido. Y hoy la utopía se hizo realidad: ya en ningún delirio mental podré ser su nieto. Eso me hace muy feliz.
©2024 Revista Cítrica. Callao 360, Ciudad Autónoma de Buenos Aires - Argentina - Editor responsable: Cooperativa Ex Trabajadores del Diario Crítica. Número de propiedad intelectual:5313125 - [email protected] | Tel.: 45626241