Los desaparecidos que Avruj no cuenta

por Revista Cítrica
26 de agosto de 2016

El secretario de Derechos Humanos pospondrá hasta diciembre el desalojo en la ex ESMA a los artistas del Monumento a la Mujer Originaria. Pero se negó a reconocer a los pueblos originarios como los primeros desaparecidos de la historia argentina.

Hay dos verdades sobre el gobierno de Cambiemos. La primera es que ante los reclamos populares es capaz de recular y dar marcha atrás con algunas medidas o recibir a los perjudicados. La segunda es que en materia de Derechos Humanos (por acción, omisión o simplemente por barbaridades discursivas) se va al charco todas las semanas.

La semana pasada el gobierno se empantanó al solicitarle a la justicia que desaloje de un galpón de la ex ESMA a los artistas que allí construyen el Monumento a la Mujer Originaria- MMO-. La elección de realizar la obra en ese espacio no es casual: “Los Pueblos Originarios son los primeros desaparecidos de nuestra historia, víctimas del terrorismo de Estado y el accionar del Ejército Argentino, sufriendo la tortura, el destierro, el robo de bebés y la esclavitud como les sucedió a los 30.000 desaparecidos de la última dictadura militar. Y porque la promoción y la protección de los Derechos Humanos deben contemplar a todos los miembros de la familia humana”, explican los artistas.

El Monumento se construye con llaves que han donando miles de ciudadanos de las 23 provincias de la Nación. Osvaldo Bayer, Estela de Carlotto, Adolfo Pérez Esquivel y el fallecido escritor uruguayo Eduardo Galeano son apenas algunos de los que han apoyado el proyecto.

Todo esto al secretario Claudio Avruj aparentemente no le importa. Él simplemente necesita poner un par de oficinas de la Secretaría en el galpón y esta semana recibió a los artistas solo por la fuerza que hicieron los organismos y referentes de derechos humanos y para evitar un conflicto mayor. “Le pedimos que nos deje hasta diciembre para que podamos seguir avanzando. Tuvimos una reunión bastante calentita. Él está muy interesado en que nos vayamos. Entonces las condiciones para poder irnos son que nos de hasta los últimos días de diciembre y que en el caso de que haya otro lugar adonde nos mude, que nos ponga toda la logística. Dice que necesita poner ahí una especie de extensión de las oficinas de la secretaría de Derechos Humanos, es algo un poco peligroso con los planes que tienen; no les confío ni un poquito. Ellos dicen que están alquilando un montón de otras oficinas en otros lugares”, le relata a Cítrica Andrés Zerneri, el artista plástico a cargo de la obra.

La reunión fue dura. Cuando Zerneri explicó la importancia de que el Monumento se construya en la Ex Esma, la respuesta de Avruj fue poco propia de un funcionario: “No voy a contestar a la sarta de pavadas que estás diciendo”. El artista intentó hacerle entender el proyecto y explicarle la importancia política pero el funcionario insistió con la cuestión práctica: “No es una cuestión política. Simplemente queremos que se vayan de ahí porque tenemos que traer un montón de cosas de la Secretaría de Derechos Humanos”. Y agregó que no alcanza con que dejen el galpón. Tampoco los quieren en otro lugar del ex Centro Clandestino de Detención.

Más allá de que los argumentos de los artistas del MMO no fueron escuchados ni refutados, el acuerdo aunque insatisfactorio estaría cerca: “Nos dijeron que el juez tendría que levantar la medida cuando lleguemos a un acuerdo. Según entiendo ellos aceptan esta idea que le pedimos nosotros de pedirles quedarnos ahí hasta diciembre, de darnos una prórroga. Igual no llegamos a terminar el monumento para esa fecha. Avanzaremos y tendremos la escultura terminada pero no pasada a bronce”, explicó Zerneri.

Después de diciembre, la obra probablemente se continuaría en la universidad de Hurlingham, un buen lugar para resguardar el bronce y avanzar con la escultura. Y luego vendrá un debate mucho más grande: porque la idea es donarle la escultura a la Ciudad de Buenos Aires para emplazarla donde ahora está el monumento al General Roca. “Va a ser complejo. El contexto está cada vez peor. Dejarla en la ESMA tampoco parece una posibilidad. Dejarlo al resguardo de estos tipos es tirar el monumento. Es desaparecerlo”.

¿Qué argumentos les da Avruj para no reconocer a los pueblos originarios como los primeros desaparecidos de la historia argentina?

La perspectiva que nosotros tenemos de pensar que los pueblos originarios son los primeros desaparecidos, Avruj no la comparte. No la toma en absoluto. Y por eso dice también que los pueblos originarios son una cosa y los derechos humanos son otra.  Cuando yo le conté la primera vez que nos vimos las actividades que hacemos con ls organismos de derechos humanos, el me dijo: “No, acá los pueblos originarios no tienen nada que ver. Yo le dije: “Se llama Secretaría de Derechos Humanos y diversidad cultural”. “Yo de este tema sé”, me contestó. Entonces se supone que a él le bajó el conocimiento simplemente por estar en el cargo. Su mirada es esa. Para él la Secretaría de Derechos Humanos se limita solo a cuestiones vinculadas a la última dictadura militar”

Avruj también sostiene que el Estado no pidió ningún monumento….

Él dice que la construcción no es democrática porque si el estado necesitara un monumento organizaría un concurso, que nosotros nos arrogamos ser los elegidos para hacerlo. Es una obra construida por un grupo de personas. Es como si hay un periodista le dijeran que espere a un concurso para hacer una nota. No tiene ningún tipo de argumentación lógica. Nosotros pedimos el espacio, nosotros estamos construyendo y haciendo la campaña. Sea como sea vamos a terminar la construcción del Monumento y si los tiempos cambian volveremos a ese lugar.

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