“La lucha continúa”

Por María Rosa Vidal Ñancucheo

Hoy más que nunca el encuentro tiene que llegar a Chubut. El compañero Santiago Maldonado ha desaparecido, pero no es la primera desaparición en democracia. En el Sur desaparecieron muchos hermanos más. Como muchas chicas, a las que se las llevan del Norte para prostituirlas en el Sur. Actualmente, tenemos muchas adolescentes que fueron arrancadas de sus casas  y se las lleva al sur para la prostitución vip. Puerto Madryn es una ciudad internacional adonde pasan esas cosas.

Queremos denunciar todas las desapariciones que hay dentro de nuestros pueblos. Todo lo que pasa con la prostitución en el Sur y el Norte del país y con los femicidios que no son esclarecidos. Queremos denunciar que nuestros derechos no son respetados. Hay lugares donde la mujer no tiene derecho a nada, no se puede quejar ni puede reclamar. Nada. En todos los ámbitos nos tratan como inferiores y es muy fuerte el machismo que vivimos. En la comisaria de la mujer de Puerto Madryn, por ejemplo, tenemos a una mujer muy machista. Y no hay peor cosa que una mujer machista.

Los pueblos originarios no fuimos reconocidos todavía por el Estado como víctimas de crímenes de lesa humanidad. Y lo somos. En nuestros territorios hubo muchos centros clandestinos de detención y sufrimos siempre las desapariciones.

Lamentablemente, padecimos muchos sufrimientos con las tierras. Se crearon comunidades fantasmas que terminaron consumiendo el dinero que era para los territorios. Todos esos pueblos a los que se les tenía que entregar los títulos hoy siguen esperando. Hoy los pueblos originarios tenemos la posibilidad de visibilizar nuestras problemáticas.

El saber de la mujer ocupa un lugar muy importante en nuestras culturas originarias. Nosotras hablamos de la dualidad, por eso traje un hermano que me acompaña en este encuentro. Él ejerciendo su lado masculino y yo mi lado femenino. Ambos roles se cambian, en comunidad con la tierra. Somos eso: tierra y dualidad.

Hace dos años estuvimos muy cerca de ser sede del Encuentro Nacional de Mujeres. Ahí todavía dudábamos un poco. Ahora estábamos con muchas ganas  de serlo y vinimos decididas. Formamos una comisión con la certeza de hacer todo para que nuestra ciudad sea la más aplaudida. Y acá estamos: Originarias, sindicalistas, obreras, trabajadores, las mujeres de Chubut vinimos a invitarlas a nuestro territorio. La lucha continúa.