Frío inhumano, inhumana ciudad
Fuimos recorriendo barrio a barrio, potrero a potrero de la Ciudad de Buenos Aires, preguntándonos: ¿Qué le pasa al fútbol nuestro de cada día? Esta es la última entrega de las charlas que mantuvo Revista Cítrica con referentes del periodismo deportivo. Esta vez conversamos sobre el reglamento y las mejoras del juego; y Sobre el futuro del fútbol.
En lugar de buscar las razones en el propio costal, muchas veces se endilga al vecino de turno los pesares que aquejan el motivo de la charla que sea. La excusas -o no- que se reparten culpas en torno al fútbol que vemos, muchas veces son endilgadas sistemáticamente a todos los actores que conforman el escenario: la AFA, los dirigente, la violencia, los malos jugadores, los entrenadores conservadores, la presión, los árbitros, los terrenos de juego, las indomables pelotas, y quizá también, el reglamento permisivo. “Yo cambiaría el tema del número de faltas, que no se pueda jugar bruscamente con el cuerpo como se permite ahora, que muchas veces sacan al rival de un pechazo”, sostuvo Víctor Hugo. “Cualquier toque desde atrás, queriendo o no, debería ser sanción de tarjeta. La idea sería buscar reducir la fricción por las vías más expeditivas y tratando de que el fútbol quede con la cantidad de jugadores que soportan los terrenos hoy día en referencia al aspecto físico, que serían 10 contra 10 como máximo”.
Moores se mostró satisfecho con el regreso de los torneos largos y Fabbri exhortó la incorporación de la tecnología. “En principio, la determinación sobre si la pelota salió o no salió, entró o no entró, sería lo básico. Luego, habría que ir sumando determinadas situaciones reglamentarias. El fútbol es un deporte machista, conservador, poco afecto a los cambios, pero son necesarios. Incluso, iría revisando la presencia de más jueces y/o asistentes en cada partido oficial”. El aumento de árbitros también está dentro de las ideas de mejoras que propuso Hamilton y además agregó que “prohibiría que los jugadores se puedan tirar a los pies para robar una pelota, como en el fútbol 5. Eso cambiaría radicalmente la forma de marcar y le daría al juego más estética”.
Por su parte, Llonto explicó que el problema no sería el reglamento. “No es impedimento para ver partidos mejores. La posibilidad de jugar distinto tiene que ver con cuestiones de formación, de cabeza y de conciencia. El jugador que hoy quiere lucirse en una buena jugada, lo puede hacer tranquilamente con este reglamento. Creo que lo que se puede agregar sería la incorporación de la tecnología para reparar una injusticia”, dijo, en consonancia con lo expresado por Fabbri.
“No me animaría a sugerir posibles cambios. Que lo haga la International Board, así logran hacernos creer que sirven para algo”, pronunció Canillán. Sin embargo agregó que “tenemos un reglamento que ya fue exprimido en su totalidad y que no obliga a los equipos a ser protagonistas, como ocurre en básquet, que hay 5 segundos para cruzar mitad de cancha, ni premia a quienes por cuenta propia deciden ir al frente. La mayoría de los equipos advierte que cuando esperan y juegan de contrataque gastan menos energía, encuentran más espacios y se pueden defender mejor para desgastar la moral del rival. Hasta el equipo mas avaro del mundo tiene al menos 2 posibilidades de gol, y entonces solo hace falta tener precisión.
"Debería volver el verticalismo al juego, pero eso depende de la osadía, y hay entrenadores te piden que no arriesgues, que toques para los costados y para atrás permanentemente. Increíblemente, estos entrenadores, tienen un cierto prestigio de que les gusta el buen juego, lo cual es un mamarracho desde mi punto de vista. Si llegan a ganar esos directores técnicos, estamos fritos. Si España es la escuela, el fútbol -como espectáculo- está frito. Pero no va a ser así" afirmó Víctor Hugo Morales sobre sus deseos a futuro con respecto al juego.
Por su parte, Moores afirmó: "me resisto a pensar en blanco o negro. Un ciclo será a lo Bielsa o Martino. Otro, a lo Cappa. Otro a lo Caruso o Sabella. Así es el fútbol.
"De los últimos años de fútbol mundial, tuvimos a una Alemania muy fuerte en Brasil. El estilo de España fue visualmente lindo durante Sudáfrica 2010, técnicamente irreprochable, pero limitado (me parece) a un esquema y un grupo determinado de jugadores", dijo Fabbri. "No los veo con demasiados imitadores, sino todo lo contrario. Aislados, exitosos pero reducidos a pocos equipos en el mundo".
Hamilton afirmó que cree que las cosas tienden a mejorar, "lo que no quiere decir que un estilo de juego supere a otro. Siempre existirás los representantes del fútbol más cuentapropista y los que se afilian al tiki tiki. Cada uno tendrá su libreto".
Por su parte Llonto sostuvo que "si un multimillonario hubiese contratado a los Beatles, a los Stones y otros y los pone en su mansión a crear, es probable q salgan buenas canciones. Pero hay q ver si eso genera contagio al resto para crear. Insisto con el ejemplo de España: sería una respuesta a la escasez que hay por debajo de crear esa conciencia. Como no la hay, habrá que esperar otra, que alguna vez se produzca el milagro de que aquella España marque el paso del fútbol mundial y allí se verá.
La discusión hoy pasa por eficacia o ineficacia y ahí o me meto porque si vos preparás laboratorios, a mi no me parece q eso sea interesante de discutir. Siempre hay un campeón, y otro que pierde, como ocurrió en Brasil 2014 en la final con Alemania; no hay campeonatos en los que todos salgan últimos o todos primeros. Entonces cuando se busca la eficacia, la vías para llegar a ella, que la discutan otros. Uno habla del fútbol como juego, como diversión y con tratar de salir con la panza llena de ver algo, como en otros espectáculos: puede haber programas con mucho rating y plata y después hay que ver si salís alegre de verlo. Quien compra y colecciona cosas la compra por su belleza, uno compra el dvd con los goles más lindos, las jugadas de Maradona, y ponés eso para divertirte y admirarte.
"Si quisiera hacer un presagio, diría que (siempre dentro del reglamento actual) el fútbol se encamina a endurecer su tendencia pragmática y utilitaria en la mayoria de los equipos" sostuvo Canillán. "Los que protagonicen o propongan serán cada vez menos y los mismos de siempre: Los grandes que compran a los mejores jugadores y por eso salen a atacar (esto dicho más por el fútbol internacional que por el nuestro). Todas las actividades del hombre se modifican y cambian su rumbo según los condicionamientos que padezcan y las posibilidades que se le ofrezcan. Los gambeteadores van camino a morir por culpa del reglamento: Los jueces no protegen en general a los que lo intentan. ¿Cuál fue la consecuencia? Los DTs hartos de perder a sus mejores jugadores por varias fechas a raiz de golpes no sancionados les dijeron: "Basta de recibir golpes!!! Hay que tocar de primera, sacarse la pelota de encima antes de que puedan golpearte". Si prestás atención, en el futbol de Europa es casi imposible ver que un jugador encare a otro y lo eluda con un enganche. Y si lo ves seguro es un sudamericano.
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