"Te vamos a pagar la mitad de lo que te corresponde"
La publicación porteña, muy ligada a un Diego Kravetz que se lava las manos, es noticia por dejar en la calle, precarizar y perseguir a sus trabajadores.
La historia se repite una y otra vez a lo largo de nuestro país. Esta vez es en la Ciudad de Buenos Aires, donde no se sabe a ciencia cierta quiénes son los dueños de una empresa periodística que precariza a sus trabajadores, los persigue y los deja en la calle. Ante la ausencia de un sindicato, la UTPBA (Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires), que tiene la manía de quedarse callado o hacer que no ve, las patronales “hacen lo que quieren”.
Reproducimos la información que difunden por estas horas los trabajadores de prensa de Noticias Urbanas, un medio muy ligado al ex legislador Diego Kravetz, quien lejos de hacerse responsable y dar la cara, se niega a dar información sobre los verdaderos dueños de la empresa.
“A mediados de 2012 los trabajadores de la firma Producciones Urbanas SRL, que edita el semanario Noticias Urbanas y la página web www.noticiasurbanas.com.ar, recibieron la noticia de que nuevos socios ingresarían a la empresa, en pos de lograr mejoras económicas y un cambio en la elaboración de ambos productos periodísticos.
Para ese entonces, la redacción tenía una división bastante clara, donde un grupo se encargaba de la página web y otro de la publicación del semanario, siendo que los segundos cobraban sueldos que llegaban a tener hasta diferencias de 3 mil pesos con los colegas del semanario.
El ingreso del ex Infobae Facundo Chaves Rodríguez, como nuevo jefe periodístico, traía consigo una misión: revalorizar el desarrollo on line como principal objetivo.
Chaves convoco a una reunión en donde hablo de "voluntad" para pedir a los trabajadores, sin importar qué ingresos percibieran, que cumplieran también tareas en la página web además de seguir haciendo el semanario, una tarea que llevaba casi toda la semana, porque a su juicio, con el potenciamiento de la web, el semanario se iba a “hacer solo".
Los trabajadores con menores ingresos y que sabían muy bien que allí nada se hacía solo, se negaron a trabajar en ese turno tarde que Chaves Rodríguez pretendía armar a como diera lugar. Pese a esa negativa, dos veces más volvió a insistir con que los periodistas fueran a capacitaciones para aprender a manejar el nuevo editor online pero nunca respondió los interrogantes respecto al tema salarial.
Chaves renuncio al regresar de sus vacaciones en enero pero acusó a los periodistas que no aceptaron trabajar el triple por la misma paga de no haber podido cumplir el objetivo, siendo que conocía perfectamente la situación de desigualdad imperante.
El, fue la única cara visible de los socios nuevos dentro de la empresa, encabezados por el ex diputado porteño y actual titular del partido Identidad Porteña, Diego Kravetz. Kravetz jamás reconoció su ligazón con la firma pero lo cierto es que el lunes 28 de enero pasó por la redacción ubicada en Avenida de Mayo y horas más tarde, se repartieron los telegramas de despido con los nombres de Antonio Lizzano, Daniel Gaguine y Clarisa Ercolano; casualmente, tres de los cuatro periodistas que habían firmado el mail donde expresaban el rechazo a las nuevas medidas de los nuevos socios.
Un día después Kravetz respondió mediante terceros que él solo había presentado a los nuevos socios de Noticias Urbanas pero que no era el dueño. Hasta el día de hoy, se le ha preguntado insistentemente sobre el nombre de esas personas a las que presentó, pero permaneció en silencio.
Lo cierto es que tres periodistas fueron despedidos sin justa causa, casualmente los tres que firman la totalidad de las notas de la última revista y a la semana, dos más elevaron su renuncia por motivos que señalaron, explicaran con su abogados oportunamente. Anteriormente, el periodista Lucas Schaerer tan bien había sido despedido y un pasante tampoco llegó a un acuerdo y se retiró logrando un convenio en el Seclo.
Para la fecha, ya son 7 los periodistas que por despidos o diferencias ya no están en la redacción, más otros dos que decidieron renuncias por lo que prácticamente quedó diezmada la redacción y quienes permanecen allí, temen un cierre inminente o alguna argucia legal para deshacerse de todo el personal y colocar allí “periodistas del palo”.
Las liquidaciones finales ofrecidas a los despedidos están muy por debajo del cálculo real, no contemplando por ejemplo la indemnización especial por despido de periodista, la antigüedad o las sumas que se percibían en negro. A esto se agrega el grave hecho de que al día de la fecha, el sueldo del mes de enero, trabajado en su totalidad, no fue aún depositado en las cuentas sueldo, realizando una retención de haberes injustificada pero que obliga a algunos compañeros a acelerar la firma de una negociación sin más reclamos por la necesidad de cobrar ese salario que se incluyó en la liquidación final, como si lo ya trabajado fuese algo a negociar.
El ahora socio minoritario Fernando Riva Zucchelli es el único que mantuvo comunicación con los empleados y por cierto, la única cara visible de esta sociedad en donde un grupo de políticos y empresarios conoce las caras y nombres de aquellos a quienes despide pero en donde del otro lado, no se sabe a ciencia cierta a quién reclamar”.
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